Proceso de formación para ser religiosa de la Compañía de María
La persona que desea ser religiosa de la Compañía de María tiene por delante un camino de integración personal, comunitaria, espiritual y apostólica. Es un proceso progresivo para su incorporación paulatina a la Orden.
Pastoral Vocacional
En la búsqueda de tu Proyecto de vida, puede surgir en ti el deseo de conocer la Compañía de María. En este caso puedes iniciar un proceso de discernimiento vocacional, siempre acompañada por una religiosa.
Me llamo Angely y estoy en búsqueda de mi vocación. Todavía no sé lo que el Señor quiere de mí, pero intuyo que “algo más”. Estoy en los inicios, en Pastoral Vocacional, con el acompañamiento de una hermana de la Compañía voy descubriendo señales que indican que mi camino puede ser la vida religiosa.
Aspirantado
Esta Fase forma parte del proceso de discernimiento vocacional. Su objetivo es que conozcas más de cerca la Compañía de María: a través de una experiencia comunitaria, del conocimiento de distintos proyectos educativos y de otras actividades. El aspirantado es siempre flexible, se adapta a la realidad de cada lugar y a las características de las personas que desean seguir buscando el sueño de Dios para ellas.
Nos llamamos Miveline y Rose, hemos comenzado el aspirantado en Ouanaminthe (Haití). Estamos conociendo lo que supone vivir en comunidad y la misión que las hermanas realizan en el colegio. A la vez, vamos creciendo en la relación con el Señor a través de la oración personal, comunitaria y la participación en otras celebraciones. Nos sentimos felices y agradecidas por esta posibilidad que nos han ofrecido.
Postulantado
Esta es la Primera Etapa de la Formación Inicial en la Compañía. También se adapta a las necesidades y características de cada persona. Tiene como objetivos continuar el discernimiento de la vocación a la vida religiosa en la Compañía de María y fortalecer la formación como mujer y como cristiana. Tiene una duración de uno a dos años.
Soy María de la Caridad (Cachita). Desde mi adolescencia, una pregunta de Jesús me mueve internamente: «Y ustedes ¿quién dicen que soy yo? Para responderle, me he lanzado a un apasionante camino de búsqueda en el que crece mi amor por Él, el deseo de conocerle profundamente y de darle a conocer a otros para que también le amen y le sigan. He comenzado el Postulantado, en esta etapa de Formación, una religiosa me acompaña, voy conociendo la vida en comunidad, la misión de la Compañía y con la oración se fortalece mi relación con Jesús.
Noviciado
El Noviciado tiene una duración de dos años. El objetivo es formar mujeres apasionadas por Jesús y dispuestas a amar y servir a su estilo para hacer posible un mundo más justo, más humano, más fraterno… Las experiencias más significativas de esta Etapa son los Ejercicios Ignacianos y la participación en la misión educativa de la Compañía.
Al finalizar el noviciado se realizan los Primeros Votos.
La Compañía cuenta hoy con tres noviciados: Perú (América), Madrid (España) y Kinshasa (RDC)
Me llamo Thoa y soy novicia de la Compañía de María. Lo más importante de este tiempo para mi es el encuentro en profundidad con el Señor, dejar que llene mi corazón para poder hacer mías sus actitudes y su modo de situarme en la vida. Me alegra poder conocer el Carisma educativo-evangelizador que Dios regaló a la Iglesia a través de Juana de Lestonnac y sentir que conecto con él.
Juniorado
La Etapa siguiente al Noviciado es el Juniorado. La juniora vive en comunidad, va conociendo más el Carisma desde la propia experiencia y participa, progresivamente, en la misión educativa. También es un tiempo para complementar los estudios realizados y adquirir la preparación que requiere nuestra vocación a la Compañía de María.
Cada tres años se renuevan los votos y a partir del quinto año la Juniora puede pedir la admisión a la Tercera Probación.
Nos llamamos Patience, Anita, Louange y Kerene. Somos junioras, hemos hecho el noviciado juntas, ahora vivimos en comunidades diferentes. Vamos aprendiendo a poner en práctica lo que hemos aprendido y a conjugar oración, estudio y otras tareas. También a integrar con realismo las dificultades que vamos encontrando. Seguimos aprendiendo y creciendo en contacto con nuestras hermanas más mayores y realizamos la profundización y estudios necesarios para prepararnos para la misión. Contamos con una Encargada de Junioras que nos acompaña en nuestro camino.
Tercera Probación
La Tercera Probación es la última Etapa de la Formación Inicial, en vistas a la integración definitiva a la Compañía. Dura generalmente un año. Durante la misma, se recoge la experiencia de los años de Juniorado para valorar lo vivido y confirmarse en su vocación al seguimiento de Jesús en la Compañía. Es clave la experiencia del mes de Ejercicios ignacianos, la relectura de las Constituciones y el encuentro con la persona y obra de Juana de Lestonnac desde el compromiso con la Compañía Universal.
Al finalizar la Tercera Probación, si la persona confirma su opción de seguir a Jesús en la Compañía y esta verifica su idoneidad, hace la Profesión solemne.
Me llamo Arendy. Estoy realizando la Tercera Probación, está siendo un tiempo de peregrinar hacia el interior para volver a contemplar la respuesta que le he ido dando al Señor y para, afirmar deseos y convicciones y seguir enamorándome del Dios de la Vida y del carisma al que me siento llamada. Los Ejercicios Espirituales y a fase internacional, que he vivido con mis compañeras terceronas, han sido también confirmación para comprometer mi vida definitivamente con el Señor en una Compañía de María universal.
A partir de la Profesión Solemne, la religiosa se incorpora plenamente a la Orden de la Compañía de María.